En la unidad 3 de la assignatura de Introducción a la Arquitectura se ha visto la evolución de la arquitectura desde el 40,000 a.C. hasta el 1400 d.C.
Se ve como la arquitectura es una de las expresiones más duraderas y palpables del desarrollo de la humanidad. A través de la historia, las construcciones han sido no solo refugio, sino también símbolos de poder, religión, ciencia y arte. Desde las primarias y básicas estructuras prehistóricas hasta las imponentes catedrales góticas, los edificios han reflejado las aspiraciones, creencias y tecnología de cada civilización.
Arquitectura prehistórica (40,000 a.C. – 3,000 a.C.)
En la prehistoria, el ser humano dependía de los recursos naturales para crear sus primeros refugios. Estas construcciones, aunque eran rudimentarias, marcaron el inicio de la relación entre el hombre y su entorno construido. Los monumentos megalíticos, como Stonehenge (3,000 a.C.), son un ejemplo emblemático de esta época. Estas enormes piedras dispuestas de forma circular sugieren un conocimiento básico de la ingeniería y una intención ritual o astronómica.
En películas como 2001: Odisea del espacio (Stanley Kubrick, 1968) exploran la idea de la evolución humana y su relación con el entorno, comenzando con imágenes de la prehistoria que evocan la construcción de monumentos primitivos.
En la arquitectura contemporánea, esta relación con la naturaleza y el uso de formas escultóricas puede verse en el Museo Guggenheim de Bilbao (Frank Gehry, 1997). Su diseño fluido y orgánico recuerda a las estructuras prehistóricas, donde el entorno y la forma se fundían en una unidad.
Egipto y Mesopotamia (3,000 a.C. – 500 a.C.)
Las civilizaciones de Egipto y Mesopotamia son conocidas por sus monumentos impresionantes. La Gran Pirámide de Giza (2,580 a.C.) en Egipto sigue siendo un hito de la ingeniería antigua, con una geometría casi perfecta y un simbolismo ligado a la inmortalidad de los faraones. En Mesopotamia, las zigurats, como el Zigurat de Ur (2,100 a.C.), eran templos escalonados que simbolizaban la conexión entre el cielo y la tierra.
Por ejemplo en la película Stargate (Roland Emmerich, 1994) se pueden ver el misterio de las construcciones egipcias, además muestra como estas estructuras monumentales evocan tanto fascinación como temor en la imaginación contemporánea.
Hoy en día, la influencia de las pirámides egipcias sigue vigente en obras como la Pirámide de vidrio del Louvre (I. M. Pei, 1989), aunque el material haya cambiado, la forma sigue siendo un símbolo de poder y atemporalidad. Del mismo modo, edificios como el One World Trade Center en Nueva York (David Childs, 2013) evocan la forma escalonada de los zigurats mesopotámicos, conectando el cielo con la tierra en una interpretación moderna.
Grecia clásica y Roma (500 a.C. – 400 d.C.)
La civilización griega introdujo los órdenes arquitectónicos —dórico, jónico y corintio—, que sentaron las bases del diseño clásico. El Partenón de Atenas (447-432 a.C.) es un símbolo de la perfección estética griega, donde la simetría y la proporción eran esenciales para reflejar el orden cósmico. Roma, heredera de estas ideas, las adaptó y perfeccionó, desarrollando nuevas técnicas como el uso del arco y la bóveda, que permitieron la creación de espacios más amplios y complejos, como el Coliseo (70-80 d.C.) y el Panteón (125 d.C.).
En la película Gladiador (Ridley Scott, 2000), la recreación del Coliseo y otros espacios públicos romanos pone de manifiesto la monumentalidad y el poder de la arquitectura romana en la vida cotidiana y el espectáculo público.
La influencia griega y romana en la arquitectura moderna es innegable. El Lincoln Memorial en Washington D.C. (Henry Bacon, 1922) imita el estilo del Partenón, utilizando columnas dóricas y proporciones clásicas para evocar solemnidad y grandeza. Del mismo modo, el Capitolio de los Estados Unidos toma como inspiración las cúpulas romanas, recordando a edificios como el Panteón, donde la ingeniería y la estética se unieron para crear una sensación de grandeza cívica.
La Edad Media (400 d.C. – 1400 d.C.)
Con la caída del Imperio Romano, Europa entró en la Edad Media, un periodo en el que la arquitectura evolucionó hacia estilos más robustos y funcionales. Durante los primeros siglos, la arquitectura románica destacó por sus iglesias de muros gruesos, arcos de medio punto y pequeños ventanales. La Abadía de Cluny (909 d.C.) en Francia es un ejemplo del estilo románico, diseñado para albergar a los monjes y las actividades religiosas, con una monumentalidad que reflejaba la importancia del poder eclesiástico.
El estilo gótico, que comenzó a mediados del siglo XII, revolucionó la arquitectura medieval con el uso de arbotantes, bóvedas de crucería y arcos apuntados, permitiendo la construcción de catedrales más altas y luminosas. La Catedral de Notre-Dame en París (1163 d.C.) y la Catedral de Chartres (1194 d.C.) son ejemplos magníficos de este estilo, donde la altura y la luz simbolizaban la cercanía a lo divino.
En la película El nombre de la rosa (Jean-Jacques Annaud, 1986), la arquitectura gótica se presenta como un escenario cargado de misterio, espiritualidad y poder, reflejando la importancia de los monasterios y catedrales en la vida medieval.
En la actualidad, la influencia de la arquitectura gótica puede verse en edificios como la Catedral Nacional de Washington (George Frederick Bodley y Henry Vaughan, 1907-1990), que sigue los principios góticos de verticalidad y luminosidad. La Sagrada Familia de Antoni Gaudí en Barcelona, aunque es una obra única en sí misma, se inspira en la arquitectura gótica, especialmente en su uso de formas naturales y torres que parecen elevarse hacia el cielo.
Conclusión
La arquitectura es un lenguaje que conecta a las civilizaciones a lo largo del tiempo. Desde las estructuras megalíticas de la prehistoria hasta las catedrales góticas de la Edad Media, la evolución de la arquitectura nos muestra cómo las sociedades han plasmado sus valores, creencias y aspiraciones en piedra y mortero. A pesar de los avances tecnológicos y los cambios culturales, muchos de los principios y estilos desarrollados en la antigüedad y la Edad Media siguen inspirando a los arquitectos modernos.
La Pirámide del Louvre, el Museo Guggenheim de Bilbao, la Sagrada Familia y el Capitolio de los Estados Unidos son solo algunos ejemplos de cómo las ideas arquitectónicas del pasado siguen vivas, reinterpretadas a través de los ojos de los diseñadores contemporáneos. Así, la historia de la arquitectura no es un relato estático, sino un diálogo constante entre el pasado y el presente, en el que cada nuevo edificio se erige como testimonio de esta rica herencia.
REFERENECIAS
2001: A Space Odyssey (2001: Odisea del espacio. Dir. Stanley Kubrick). Metro-Goldwyn-Mayer. 1968.
Abadia de Cluny. <https://es.wikiarquitectura.com/edificio/abadia-de-cluny/> [Consulta: 19 de octubre de 2024]
Catedral de Chatres. <https://www.puentedemando.com/la-catedral-gotica-el-caso-de-chartres/> [Consulta: 19 de octubre de 2024]
Catedral de Notre Dame. <https://parisenmetro.eu/catedral-de-notre-dame/> [Consulta: 19 de octubre de 2024]
Coliseo. <https://es.wikipedia.org/wiki/Coliseo> [Consulta: 19 de octubre de 2024]
Gladiador (Dir. Ridley Scott). DreamWorks Pictures. 2000.
Il nome della rosa. (El nombre de la rosa Dir. Jean-Jacques Annaud). Constantin Film. 1986
Panteón. <https://es.wikipedia.org/wiki/Pante%C3%B3n_de_Agripa
Partenón. <https://es.wikipedia.org/wiki/Parten%C3%B3n> [Consulta: 19 de octubre de 2024]
Piramide de Guiza. <https://es.wikipedia.org/wiki/Gran_Pir%C3%A1mide_de_Guiza> [Consulta: 19 de octubre de 2024]
Stargate (Dir. Roland Emmerich). Metro-Goldwyn-Mayer.1994
Zigurat de Ur. <https://es.wikipedia.org/wiki/Zigurat_de_Ur> [Consulta: 19 de octubre de 2024]